Del “esa misma ” al “372 gramos exactos”: así ha cambiado el jugador de pádel
En Keepadel lo vivimos cada día en la tienda, pero esta vez hemos querido plasmarlo con humor (y mucha realidad) en nuestro último vídeo: el contraste entre el jugador de pádel de antes y el de ahora. Porque aunque el deporte sea el mismo, el perfil del jugador ha evolucionado... y mucho.
El jugador de antes: “¿Tienes esa blanca del logo con una X?”
La escena no necesita filtros ni efectos especiales. Llega el jugador de antes, el clásico, el de toda la vida. Polo negro, barriga, cara de haber salido del frontón y una frase que resume toda su filosofía:
“Vengo a cambiar de pala que llevo jugando con ella jodido ocho meses.”
Sin especificaciones técnicas, sin dudas existenciales sobre balance, goma o peso. Quiere una pala barata, que funcione, y si puede ser, igual a la anterior. Si le ha ido bien, ¿para qué cambiar?
Es el tipo de jugador que llegaba, miraba el estante y en menos de un minuto salía con su nueva pala. Sin reviews, sin comparativas. Solo confianza ciega en lo que conocía. Si era buena para él, era buena y punto.
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El jugador actual: “Carbono 18K, Hesacore y que pese exactamente 372 gramos”
Avanzamos en el tiempo y nos encontramos con un nuevo perfil. El jugador de ahora entra a la tienda y comienza a preguntar por las diferentes tecnologías de las palas de pádel para encontrar la que más se adapte a sus necesidades:
“Quiero una pala con carbono 18K, con sistema de pesos ajustables, Hesacore para evitar vibraciones, peso exacto de 372 gramos y balance medio-alto.”
Su nivel puede ser intermedio, pero su conocimiento es de élite. Ha visto análisis en YouTube, leído comparativas en foros, consultado a su fisio y hasta a su entrenador personal. Para él, cada detalle cuenta: el material, la densidad de la goma, el acabado de la superficie y hasta el diseño del puente.
Este nuevo jugador busca precisión milimétrica. Sabe lo que quiere y no está dispuesto a comprometerse con algo que no encaje con su estilo de juego. Lo suyo no es una compra: es una inversión estratégica.
Dos mundos, una misma pasión
Aunque parezcan dos especies distintas, ambos perfiles comparten algo fundamental: el amor por el pádel. Uno desde la sencillez y la costumbre, el otro desde el análisis y la optimización.
Y la realidad es que no hay un modelo mejor que otro. Cada uno disfruta el juego a su manera.
En Keepadel nos encanta ver cómo el deporte ha evolucionado, cómo los jugadores se interesan más, se informan y quieren mejorar. Pero también valoramos esa esencia de los inicios, cuando bastaba con que la pala te gustara y te diera buen feeling.
Por eso, en nuestra tienda seguimos ofreciendo opciones para todos los gustos: desde el que entra diciendo “esa misma” hasta el que pide una pala “con carbono 12K, tacto medio y sweet spot centrado”.
¿Y tú, con cuál te identificas más? ¿Eres del Team Vintage o del Team Técnico? Cuéntanoslo en los comentarios y pásate por Keepadel para encontrar tu próxima pala. Sea como sea, te la llevas afinada.
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